Si te gusta Van Gogh, te gustará mucho más después de leer Van Gogh y sus cartas a Theo

Todo el mundo está familiarizado con Los girasoles o La noche estrellada de Vincent van Gogh. La intensidad, los colores vibrantes y las pinceladas onduladas son las características presentes en todas las obras del artista. Si ha visitado alguna exposición o leído un poco, seguramente también esté familiarizado con su vida (nada fácil), su amor por Japón y su impactante muerte. Van Gogh y sus cartas a Theo es la segunda parte de la serie Misterios de Van Gogh. La autora utiliza como fuente principal las cartas de Van Gogh y habla de la vida del artista, la cercanía de este con su trabajo y su enfermedad mental. Las cartas demuestran que su vida no fue un camino de rosas.

Van Gogh sabía que sus obras podían venderse, así que siguió creando de forma honesta, haciendo arte “de verdad”, a pesar del gusto de la mayoría. No esperaba que el público entendiera la apariencia áspera de su trabajo. Van Gogh asumió que ser un artista significaba luchar, pero creyó que podría beneficiarse de la adversidad, tanto personal como profesionalmente. “No se gana sin luchar y no se lucha sin sufrir”.

Ser un artista conlleva sacrificios, pero en el caso de Van Gogh parece que también significó una batalla sin fin contra la pobreza, la soledad y la adversidad. Teniendo en cuenta sus circunstancias (era dependiente económicamente de su hermano, sus obras no se vendían y apenas se le reconocía su trabajo), sus logros son impresionantes.

Esto no es un libro sobre el tipo de arte que Van Gogh creó. Este libro habla sobre su vida como artista y como ser humano. Al leerlo, será capaz de apreciar y entender sus obras mucho mejor.